"Justicia popular" en Perú.
Los ronderos irrumpieron en un night club de la ciudad y arremetieron contra las chicas que ejercían la prostitución. Pero no sólo ellas sufrieron de su furia, sino que también clientes, meseros y todo el personal del establecimiento.
Las chicas fueron azotadas en las piernas y obligadas a decir sus nombres y procedencia, una por una. Los hombres obligados a hacer las conocidas 'planchas'.
"Quiero darles el mensaje de que aquí no vamos a permitir más delincuencia ni prostitución, aquí están en Cajamarca y aquí hay rondas", dijo uno de los ronderos a las meretrices.
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